AQUÉL AMIGO DEL FIN DE SEMANA

Hace muchos años escribí un poema con este título, tiempo después lo convertí en una prosa para un concurso de poesía, y aunque no gané siempre ha sido uno de mis trabajos favoritos...Hoy he decidido compartirlo publicamente y dedicarlo secretamente a mis queirdos friendcitos.... 

                                                

PARA: MI AMIGO, AQUÉL DEL FIN DE SEMANA.

Después de tanto pensar y divagar, como tan trillado pueda sonar, he decidido decirte a través de estas líneas lo que espero ya sepas, pero como de costumbre el ir y venir de la vida, me impidió contártelo y al final como siempre ocurre, llegó el día de la partida. 

Por qué nos decidimos cuando no podemos mirarnos a los ojos? eso no lo sé, por qué no hablar?, simplemente, creo que a veces las palabras se esconden detrás de una pluma, y sin embargo de lo que estoy segura es que hoy, estando a medio mundo de distancia, me siento agobiada con este sentimiento danzante el cual me ha acompañado desde creo yo, hace más de una vida…

Pues esta es la verdad, y lo cierto es, que te llevo en mi corazón con cada paso que doy; a ti, amigo de mi niñez, de mi adolescencia, de mi madurez; a ti mejor amigo, mi compañero, mi abrigo. Eres tú mi fiel amigo de fin de semana, eres, quien ahora me inspiras.

Siempre has sido mi fiel acompañante, aún y cuando tu presencia es a la vez una ausencia, mi pequeño guardián de ilusiones, contigo aprendí del error, aprendí algunas veces sobre el perdón, y quizás, no perdiste la batalla en aquello de enseñarme a tolerar, muchas veces contigo encontré la paz, otras tantas iniciamos una guerra, pero al final se mantiene latente este sentimiento inexplicable, itinerante, indomable,  aunque constante como las brasas de una hoguera que mueren y viven luchando por mantenerse.

 Y así a kilómetros de distancia, recuerdo a unos tontos niños acostumbrados a jugar, quienes en algún momento en adultos se convirtieron y sin más remedio sus destinos se disolvieron convirtiéndose en hilos sueltos, cada uno iniciando un nuevo bordado y quizás suspirando por una aventura más, juntos… Y sin embargo te sigo llevando en mi corazón, visualizando aquel querido rostro cada mañana; recordando aquel amigo de fin de semana.

Te llevo en mi corazón con cada paso que doy, en las noches cálidas, en las noches frías, con cada ola que golpea al atardecer, en cada noche de luna llena; es que cada día te llevo en mi corazón, como a todos los veranos por los que logré pasar; como a todos los ríos que logré cruzar; como a todas las montañas que al cielo nos llevó, y juntos logramos escalar.

 Cuanto tiempo ha pasado desde que nos conocimos…Entonces, me nace la inquietud ¿Todavía te conozco?, pues somos más altos que antes, con nuevos vicios y más líneas en la cara, con más de todo, pero definitivamente menos de lo que fuimos…por eso me aterrará pensar en que si algún día alguien preguntara por ti, yo quizás no sabría como contestar…

Empero a pesar de mis dudas, a pesar de ese angustiante miedo, no puedo evitar pensar en ti y simplemente sonreír, pues tal vez hoy, soy lo que soy porque estuviste a mi lado, hoy veo el mundo de una forma que sólo tú la entenderías, eso es lo que me gusta pensar y creer, siempre creer en mi amigo del fin de semana.  

Gracias por cada fin de semana, algunos nuevos, otros algo monótonos, otros llenos de patéticos lamentos al ritmo de una canción, y siempre constante como cada fin de semana…Pero sobre todo gracias mil por cada risa sin razón… Hoy con absoluta honestidad digo… ha sido un honor tenerte como mi amigo...más allá del fin de semana.

Hoy me despido de ti, hoy te digo hasta luego, no utilizo un adiós, porque esa palabra tan lejana entre nosotros no tiene lugar, pues sé que te volveré a encontrar, quizás en aquello llamado paraíso; o en la otra vida que todos deseamos alcanzar. No olvides nuestra promesa de amistad; amigos por siempre y para un siempre, amigos en momentos tristes, en momentos alegres, amigos aún más allá de toda la eternidad.

Es por eso, que sobre tu lápida he dejado, seis hermosas rojas, que al igual que este querer aún no se han marchitado;  seis rosas rojas, que en mi jardín ya no están, y al despertar cada mañana, su falta me hará pensar, en mi amigo…aquel del fin de semana.

Con todo mi amor…. Y mucho más…

Eternamente tuya…

JM

Nota: En la fotografía, los friendcitos hace sólo un par de años.